Orígenes, propiedades y usos.
La manteca de karité se obtiene del fruto del karité (Vitellaria paradoxa) que es un árbol que puede medir hasta 15 metros de altura, tener un metro de diámetro y que puede vivir trescientos años. Karité significa literalmente árbol de la mantequilla. Originario de las sabanas del oeste de África, es considerado sagrado por alguna culturas hasta tal punto que no recogen sus frutos directamente del árbol, si no los que aparecen caídos a su alrededor.
Este fruto contiene una almendra que tras ser llevada a ebullición y ser triturada genera una grasa vegetal: la manteca de karité. Tradicionalmente utilizada en la cocina local, también la utilizan como protector y para curar las heridas.
Y es que la manteca de karité ofrece extraordinarias propiedades nutritivas, cicatrizantes, hidratantes y emolientes. Da elasticidad a la piel, es calmante y un excepcional regenerador celular que previene el envejecimiento. Además no es un producto agresivo, por lo que se puede utilizar tranquilamente en el rostro y es apto para personas con la piel grasa.
Presente en la cosmética actual, también se puede utilizar en estado puro. Aun existiendo en el mercado infinidad de formatos, en su estado puro se presenta como una grasa con cierta solidez, que se funde a 28 grados, por lo que basta con el contacto corporal y un ligero frotamiento para conseguir una textura oleosa.
Aplicaciones de la manteca de karité:
- Por su alto poder hidratante es ideal para las zonas del cuerpo que sufren más sequedad: codos, talones y rodillas.
- Al ser calmante, funciona muy bien en pieles con rojeces o irritación, como la dermatitis, la psoriasis o eccemas.
- Por su acción regeneradora y cicatrizante es muy efectiva para tratar heridas, reparar las manos agrietadas por el frio, curar quemaduras, combatir las arrugas y prevenir estrías. Es ideal también para labios agrietados o nariz irritada a causa del constante roce de los pañuelos en caso de congestión nasal.
- Es un potente after sun que calma e hidrata después de un baño de sol.
- Para los chicos va muy bien después del afeitado.
Es conveniente conservarla en un lugar fresco y seco y si quieres que te dure más, aunque normalmente aguanta en perfectas condiciones hasta dos años, guárdala en el frigorífico.
Probablemente su única contraindicación se deba a la presencia de látex, por lo que los alérgicos a esta sustancia deberán tomar precauciones en cualquier producto que contenga manteca de karité.
Como ya he mencionado, en el mercado se encuentran múltiples productos a base de esta manteca. En su estado natural no deberíais encontrar ningún problema para adquirirla en un herbolario.
En el centro disponemos de un aceite vegetal 100% puro.
Pero también está presente en infinidad de cosméticos, como el C+C Vitamin Aroma Balm de Natura Bissè, que utilizamos en cabina para diferentes tratamientos hidratantes.
Si te surge cualquier pregunta, no dudes en planteárnosla.
¿Has utilizado la manteca de karité en su estado natural o en algún cosmético? Cuéntanos tu experiencia.
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